The grid

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Tomado de http://www.seti.cl/the-grid-el-increible-futuro-de-internet/

jueves, 26 de agosto de 2010

La tecnología en nuestro entorno y en nuestros espacios educativos

Considero que el nivel de impacto de la tecnología aún no es tan signigficativo en el ámbito educativo formal (escuela), es más, creo que tiene más impacto en otros escenarios como el hogar, los sitios de acceso a Internet, o las mismas bibliotecas públicas, pues los estudiantes acceden a ellas para todo, no solo para estudiar, consultar e investigar sino para ver, leer, jugar, curiosear, "cacharrear" y aprender a manejar programas, para bajar videos, música, imágenes, etc., que parecen acciones por fuera de lo que permite la escuela, salvo leer. Es decir, el entonro de la vida es mucho más cercano a la tecnología que la escuela, que, inclusive hoy, "sataniza" el uso que hacen los jóvenes de las TIC.

En la escuela se han venido incorporando algunas tecnologías, cada vez se trata de aproximar más los conceptos de educación y TIC, pero aún es muy instrumental, pues hay instituciones con muy buena infraestructura tecnológica, pero poco uso vinculado a los procesos de enseñanza y aprendizaje. A veces ni los maestros hacen uso de dichos elementos. Lo importante es que se ha venido gestando una reflexión en torno a las formas de aprender y de enseñar, pero es difícil cambiar los esquemas. No obstante, alguas universidades han venido haciendo grandes esfuerzos por trabajar con las TIC en los procesos educativos y tienen ejercicios de capacitación para sus docentes, lo que da cuenta del interés por acceder a una educación mediada por la tecnología.


Creo que hay cambios en la forma de concebir el conocimiento, por lo menos la tradicional, la de la escuela.  El saber no está en el maestro, éste ha dejado de ser el centro y esto ha puesto en "jaque" a la institución escolar, pero sobre todo al sujeto maestro. El cambio es definitivo, los estudiantes aprenden solos, sin maestros y la muestra está en que saben muchas cosas que el maestro no, entonces se juega a una especie de intercambio: el profesor le enseña al estudiante español y el estudiante le enseña al profe cómo subir las notas del curso a la red. Allí hay serias transformaciones que ponen el aprendizaje, la educación, la enseñanza, el prendizaje, el estudiante y el maestro en otro lado. Es un reto constante.

DocTIC - Propuestad de intervención

Luego de reflexionar, durante esta semana, acerca del rol que desempeño como docente, he procurado plantear una propuesta que enriquezca mis cursos de literatura; sin embargo aún me siento un poco inseguro sobre lo significativo y valioso de ésta.

Propuesta de intervención

jueves, 19 de agosto de 2010

¡DIAGRAMA SOPRESIVO!

ESTO ES ALGO QUE YO PENSÉ  QUE NO HACÍA EN MIS CLASES
He seguido una a una las instrucciones para hacer el diagrama, paso a paso, lo he hecho en Paint, por recomendación de Crsitina Posada mi compañera. Al final lo he guardado. Lo he abierto para ver cómo me quedó y... me ocurrió algo muy particular... me sorpendí a mí mismo, pues la imagen refklejaba algo que no es coherente con mi pensamiento y con mi visión de la enseñanza de mis clases.

Continué leyendo las actividades en DocTIC y descubrí que sigo siendo un profesor tradicional, dictador de clase, que llevo todo, controlo todo, dispongo hasta la misma comunicación entre mis estudiantes; que los elementos que llevo a la clase no varían, ni transforman la dinámica... he sentido vergüenza, pues tengo 43 años y repito esquemas que me enseñaron desde los 6, cuando entré al Kínder de doña Juventina. Esta vergüenza tengo que enfrentarla, pues me he creído mis propios cuentos, pero no he cambiado mi enseñanza.

Sorpendido, me descubro como un repetidor de los esquemas en los que he sido formado. Como dice Monterroso en su fábula El grillo maestro:  "sastifecho de que en la escuela todo siguiera como en sus tiempos." Y yo que he tratado de salirme de los esquemas los sigo repitiendo, esto me pone en una situación crítica, pues tenía una imagen de mi enseñanza y veo que no es real.

En relación con todo esto tengo que decir que me falta mucho para ser un facilitador desde el lado, pues mi estructura mental me ata bastante, no me permite transfigurar mi rol de docente, de adelante, del frente, del centro... es una verdad que debo enfrentar y tratar de solucionar... de verdad me quedo muy pensativo con este ejercicio, pues por fin surge la verdad: me he estado engañando a mí mismo, pero no a los demás.

miércoles, 18 de agosto de 2010

La moderación

Para hablar de este tema, empecemos por las definiciones:
  • Moderador: quien prepara, coordina, orienta, guía y conduce un curso virtual. Es quien tiene la obligación de una comunicación bidireccional para dinamizar el proceso en la red. Es el "cerebro" que pone a marchar una clase y que interviene de manera precisa para generar discusión, trabajo colaborativo y retroalimentación.
  • Facilitador: es alguien que dirige un curso que ya está organizado y preparado por otro, pero que sigue las directrices que ya están planeadas. Se parece más a un operario.
  • Expositor: es alguien que conoce un tema y lo presenta  a los demás, de manera oral o virtual.

En los cursos, en los que me he formado en este ambiente, he tenido las 3 figuras y he reconocido que el verdadero trabajo está en la moderación, pues es el rol que marca la pauta en este ambiente, pues no pueden dejarse ningún cabo suleto, nada puede ser al azar y la planeación debe ser sistemática y muy organizada.

Lo mejor que he visto en algunos docentes de cursos mediados por TIC es el conocimiento y el bagaje que tienen, tanto en herramientas como en el manejo discursivo en torno a los temas que desarrollan.   Esto me motiva al aprendizaje. Entre ellas están: el manejo de la plataforma Moodle, del CmapTools, wikis, las presentaciones hechas en Flash y el reconocimiento de buscadores y programas para bajar software. Esto me ha llevado a "cacharrear" y aprender muchos aspectos de manera autónoma.

Una de las prácticas aprendidas y que involucré en mis prácticas de aprendizaje y de enseñanza fueron los mapas conceptulaes con CMapTools, y los grupos de discusión en Yahoo y Gmail, para trabajar los cursos de prácticas docentes que no requerían tanta presencialidad. También aprendí a guardar mis páginas favoritas para no tener que repetir tanto la búsqueda de información que constantemente requería. Lo que más me gustó de esos cursos de formación en TIC fue que no tenían una evaluación cuantitativa, sino cualitativa, que permitian dar cuenta del aprendizaje por medio del montaje de un curso o de un proyecto de aula.

"Facilitación desde el lado"

Después de 23 años de docencia he vivido una transformación que no esperaba, pues fui formado en un paradigma tradicional que repetí durante muchos años y que todavía aparece en muchas de mis clases: maestro del frente (tablero) o de adelante; eje, orientador, guía... de las clases. Sin mi presencia no había clase, yo era indispensable, el profesor de Español y  Literatura, de Redacción y Comprensión Lectora, de Técnicas de Comunicación, etc. La transformación consiste en que hoy no soy el centro del proceso de enseñanza, ni el que se para, o se sienta, al frente... hoy trabajo otras opciones, tales como esa de estar al lado de los estudiantes, motivando, incentivando, compartiendo y aprendiendo todo el tiempo, aunque haya quienes debaten que un maestro no va  a clase a aprender. Yo tuve la fortuna de tener un maestro (Manuel Ángel Muñoz) que me enseñó que uno aprende en cada clase más que los estudiantes, que después de una clase uno no puede ser el mismo de antes... idea que he comprobado al pie de la letra.

Lastimosamente los esquemas, los paradigmas, son tan fuertes que cuesta mucho trasgredirlos, pues como decía Héctor Abad Gómez, político y maestro, a los jóvenes de hoy hay que decirles todo, hay que decirles qué hacer, qué leer, qué investigar, porque si no se les dice y no se les da, enonces no saben qué hacer, se sienten perdidos. Es muy fácil acudir al maestro hasta para lo más sencillo, como preguntar el significado de una palabra...

Facilitador desde el lado... indica salirse del centro, dejar el frente, la sillas y el tablero, pasar a las sillas de los estudiantes, a la vida de los estudiantes, al aprendizaje de los estudiantes para, desde el conocimiento y la experiencia, acompañarlos, invitarlos, incentivarlos, moverlos, llevarlos al conociemiento, al aprendizaje. Salirse del centro de la enseñanza es permitir el aprendizaje de los estudiantes, permitirlo sin las obligaciones y las cohibiciones que tiene la cátedra magistral, en la que se enuncia, muchas veces, desde el gusto, desde la subjetividad... desde el ser (particular) y no desde el saber. Cuando uno cambia el paradigma se siente perdido, descontrolado, como en otro universo... así es, se ha transformado.

La evaluación vista por otros colegas

He consultado con colegas de las facultades de Comunicación Social y de Educación.

Procuran evaluar el proceso y los resultados por medio de diferentes actividades, con diferentes porcentajes valorativos. Aunque no todo se califica, sí plantean desde el inicio diferentes actividades que sí serían calificables e incluyen los criterios a evaluar. Además, suelen proponer como actividades evaluativas el uso de mapas conceptuales, el ensayo, los informes de lectura, los artículos científicos, los comentarios.

Es importante mirar tanto la evolución del estudiante en su relación con el conocimiento, como el resultado de sus reflexiones o elaboraciones conceptuales. Además, que logre una construcción colectiva del conocimiento. El conocimiento se construye por la reflexión y por el diálogo con otros, por el intercambio de ideas.

La evaluación es clave en el proceso de aprendizaje y, sobre todo, en el proceso de crecimiento intelectual, tanto para el estudiante (que pueda notar que aprendió) como para el docente (que pueda hacer visibles los cambios cognitivos en sus estudiantes). Por eso hay que tratar de que las instrucciones sean claras, y que queden explícitos como los criterios y los tiempos de evaluación. La actitud frente a la evaluación es positiva, aunque es la fase más dura y difícil de manejar en el proceso formativo. Es un reto ser justos en las calificaciones cuando hay tantos aspectos en la evaluación que pueden resultar subjetivos. Así uno trate de ser objetivo y de poner y cumplir parámetros, la evaluación es complicada porque se ponen en juego intereses y valoraciones que como seres humanos todos tenemos.

Pues, en los cursos virtuales, todo el proceso de formación y seguimiento se hace a través de la plataforma moodle. En la plataforma están tanto el trayecto completo como las actividades y los distintos momentos y criterios de evaluación.  Durante el curso, uno entra para verificar quiénes están o quiénes han participado y si hay dificultades o dudas sobre el proceso. En el caso de los cursos presenciales, utilizan utilizo mucho los correos electrónicos para el envío de material, para manejar informaciones claves del curso (cambios de horarios o de aulas, cambios en el proceso de asesoría, recordatorios sobre fechas de entrega o sobre las pautas de trabajo). Cuando los cursos son  mucho más tutoriales, el seguimiento es cara a cara y la evaluación es a partir del cumplimiento del cronograma, participación en las asesorías y entrega de informes. La evaluación se hace con los estudiantes, en las asesorías, y las calificaciones se ponen directamente en el sistema de infromación de la UPB (SIGAA).

viernes, 6 de agosto de 2010

La evaluación... ese insondable misterio.

Para mí, la evaluación siempre ha sido un problema, enseñar es lo mejor del mundo, pero evaluar es la dificultad de esta profesión, evaluar de acuerdo con lo que me enseñaron: una medición, un resultado, un objetivo, una meta, un examen al que hay que reponder... por eso es que la veo como problemática, como una coyuntura a la que no quiero llegar. Es típico, en este sistema repetido, que un estudiante tiene un concepto de un profesor, muy bueno o muy malo, hasta el día en que recibe su primera evaluación... después nada será lo mismo: ni el curso, ni el profesor, ni el estudiante. Esto lo he vivido en mis clases.

La evaluación es el "coco" en la educación, sobre todo si no se mira como un proceso y no como un asunto terminal. Cuando digo proceso me refiero a que no hay momentos exclusivos para evaluar, sino que en cualquier instante se podría evaluar, es decir, reconocer el nivel del saber del otro, en donde va, qué claridades y dificultades tiene, pues solo salvándolas puede verdaderamente aprender, sólo, él sabe qué sabe y una  prueba, examen, taller, escrito (ensayo, crítica, reseña, etc.) arroja un resultado parcial de conocimiento.

En el medio virtual no hay variación, el proceso es el mismo, pero me ha parecido que es en éste en el que he comprendido mejor lo que es un proceso. Yo puedo evaluar mi proceso en relación con lo que he hecho hasta ahora y reconocer cómo he avanzado en el proceso del curso DOCTIC. es en este ´mabitro dónde he reflexionado más sobre la evaluación, pues es más flexible, menos condicionada, muy exigente y pone en evidencia el aprendizaje en estos entornos. Creo que le mismo acceso a las TIC genera ya un proceso de apropiación y de conocimiento. Evaluar mi proceso de escritura en un clase presencial se reduce a un asunto mecánico de como decía un profe en le colegio: "hoja, papel y lápiz" (acentuación, puntuación, ortografía, sintaxis, semántica). Por el contrario evaluar mi aprendizaje en TIC dará cuenta del manejo del aparato, que lleva implícito las funciones o acciones que debo realizar. Es decir, en este ambiente  la evaluación me ha servido para darme cuenta de mi estado actual de conocimiento.

Como ya enuncié los proceso evaluativos tradicionales son parciales, no corresponden a un proceso sino a un momento, a una acumulación determinada y afectan los procesos globales de aprendizaje. Dicho de otra manera la evaluación sirve para estudiar y ganar una prueba, no para determinar el nivel de saber.Por el contrario mi experiencia en la red me ha reportado otro tipo de evaluación, la que ya enuncié, una que permite mostrar qué se sabe.

En mi experiencia docente he tratado de cambiar el esquema de evaluación de pregunta-respuesta, para salir de lo reiterativo, y he buscado una evaluación propositiva con base en el saber trabajado, es decir, siempre les dejo a los estudiantes sacar las notas de clase para que construyan una nueva situación, una nueva idea, un nuevo concepto del área. También he buscado que se pregunten por el saber en otros contextos, en otras disciplinas, en otros espacios, que enfrenten situaciones hipotéticas que les exigen argumentación desde el conocimiento. Sobre todo he tratado de salirme del esquema de la evaluación únicamente escrita donde se reponde a unas preguntas y a unos procedimientos preestablecidos. Lo que más procuro es que se den cuenta de que saben, o no,  algo y lo demuestran en lo que proponen, no solo en lo que yo les pido.

jueves, 5 de agosto de 2010

Conversaciones con estudiantes

 Consultados: un estudiante de Publicidad y dos de Trabajo Social del 4° semestre.

1. ¿Has participado en espacios educativos en línea, o has usado la tecnología (en especial el computador e Internet) para apoyar tu aprendizaje? ¿Cómo lo has hecho?

Estudiante A: sí, he usado bastante la tecnología, me he vuelto muy dependiente de la información en Internet. Lo bueno es que he aprendido a profundizar y no me quedo con lo priemero que encuentro, busco en blogs, universidades, periódicos y bibliotecas.
Estudiante B: sí, he estado en cursos del sena, en la paltaforma virtual.
Estudiante C: sí, he usado la tecnología para mia prendizaje, de dos maneras: búsqueda bibliográfica para desarrollar trabajos, y búsqueda de textos significativos para mi vida. 


2. ¿Cuando has usado la tecnología para aprender, ha sido por iniciativa propia o por indicación de tu profesor(a)? ¿Qué te hace participar?

Estudiante A: sí, la uso por iniciativa propia, para buscar cosas que me gustan, para alimentar el ojo como dicen en mi carrera (Publicidad): ver fotos, videos y argumentaciones de campañas exitosas en publicidad y mercadeo, tanto nacional como internacionalmente. A veces la uso para investigar asuntos que me llaman la atención y también la he utilizado porque "me toca".
Estudiante B: no fue propia, fue  por consejo de un amigo. Me hace participar la curiosidad, para explorar otros medios de conocimiento que no son usuales para mí.
Estudiante C: lo hago por propia iniciativa, para profundizar en lo que los profesore dicen y tener unas respuestas más claras de algunas dudas académcias que me sugen.

3. ¿Tienes alguna herramienta, programa o aparato favorito para aprender? ¿Y si no se trata de aprender, cuál es tu favorito? 

Estudiante A: Google es el que me soluciona muchos problemas, y tal vez por tecnología Adobe Ilustrator.
Estudiante B: los mapas conceptuales.
Estudiante C: PDF


4. ¿Qué ganas cuando participas en espacios educativos que hacen uso de la tecnología? ¿Qué te queda? 

Estudiante A: es muy importante para mi carrera, pues nos hace más competitivos, nos fundamenta mejor y nos hace la clase más entretenida.
Estudiante B: gano al expandir mis horizontes, pues al ingresar a una plataforma o curso virtual se abren posibilidades que en el aula de clase no se pueden tener. Me quedan dudas y curiosidad por saber y aprender más.


Estudiante C: gano más conocimiento, aprendizaje y fortalecimiento  en mi formación integral.

5. ¿Si es bueno eso de usar la tecnología en la educación, o es mejor no mezclarlas? 

Estudiante A: me parece mejor mezclarlas, pues en educación se pueden aprovechar más las tecnologías, sin dejar de lado las viejas costumebre como visitar la biblioteca. Es importante mantenernos actulizados en tecnología, pues el mundo va evolucionando y lo exige.

Estudiante B: es bueno, pues así se realiza una globalización positiva del saber, ayuda a expandir las fronteras del conocimiento.

Estudiante C: lo mejor es mezclar, pues solo usar la tecnología crea dependencia de ella y se pierde la riqueza que da la educación en el aula, los libros, el teatro, la lúdica,  etc.

En estas conversaciones  he confirmado lo que siempre he pensado: los estudiantes están vinculados a las TIC, sobre todo a Internet, pero les falta orientación y conocimiento al respecto. Incluso hay quienes prefieren los métodos tradicionales para el aprendizaje, pues son más cómodos que la exigencia que tiene el adentrarse a trabajarlos por medio de Internet.

Hay algo muy importante que quiero rescatar y es que la motivación propia es lo más significativo en los jóvenes. Lo que los lleva a trabajar con las TIC es su propia iniciativa, sus intereses particulares y profesionales ( con quienes hablé), pero también la novedad, la curiosidad que les hace perder el miedo a lo nuevo (lo que no ocurre con muchos mayores).

Creo que los jóvenes comprenden más fácil que el aprrendizaje se logra mezclando tradición y tecnología y no polarizan sus posiciones en torno a qué es mejor. No las consideran ni la perdición ni la salvación, las usan en la medida que les favorece su aprendizaje y sus intereses.

lunes, 2 de agosto de 2010

Experiencia previa

  • ¿Cuál ha sido el sentido (o propósito) de su participación en estos espacios en línea (para qué ha participado en ellos)?
Mis propósitos han sido dos: vincular las TIC a mis procesos de aprendizaje y de enseñanza, y poner a prueba el aprendizaje en ambientes virtuales.
  • ¿Cuáles han sido las razones (causa) de su participación en estos espacios?  Note que una respuesta válida puede ser "porque lo decía el plan de estudios". (Intente distinguir aquí entre propósito y causa. ¿Hay diferencia?)
He participado en cursos de formación para planear y servir una asignatura, posteriromente, en esta modalidad. También tengo que reconocer que otro propósito fundamental ha sido no quedarme por fuera de las TIC en mi profesión, pues soy muy inquieto con respecto a los artefactos y sus diferentes usos, y me inquieta ver cómo mis estudiantes hacen uso de ellos con tanta facilidad. En última instancia, no quiero quedarme al margen de la tecnología ni de mis estudiantes.
  • ¿Qué ha obtenido con su participación? No se trata sólo de indicar que aprendió alguna cosa, sino de cuáles son los beneficios que obtuvo. ¿Para quién participó? ¿Para usted, o para su profesor/facilitador? ¿Es importante esto?
Una nueva visión del mundo, sobre todo de las relaciones, de la socialización que se genera con las TIC, pues han posibilitado acercar más que cualquier cosa a la gente. Creo que tengo una posición diferente como padre, como maestro y como ciudadano, frente al uso de las tecnologías. Y aunque he paricipado para un proceso universitario, fundamentalemnte lo he hecho para mí.

  • ¿Qué papel ha jugado la tecnología en su participación en estos espacios en línea? ¿Ha sido un elemento facilitador o un obstáculo?  ¿De qué depende?
El papel de la tecnología ha sido muy positivo, sin volverlo el centro, ni lo máximo. Efectivamente me ha facilitado muchos procesos: contacto y seguimiento con mis estudiantes, reconocimiento de nuevos escenarios, transfiguración de los roles y de la particiapación. Aunque en algunas ocasiones he enfrentado dificultades dentro del proceso de socialización de los cursos, pues los jóvenes creen que al encontrarnos el curso sigue siendo virtual y no participan como cuando estamos en la red. He tratado de mejorar esto, pero sigue siendo un problema. En algunas ocasiones, me he sentido desmaterializado y añoro la presencia, más que la virtualidad.

Creo que el éxito o el fracaso de su uso está en la planeación de los cursos y en el reconocimento de la tecnología para sacarle el mejor provecho sin volverla lo único.   

  • ¿Cómo fue su interacción con otros participantes? ¿Hubo colaboración o cooperación? ¿Fue equitativa? ¿Generó algún tipo de exclusión?  ¿La tecnología incidió de alguna manera?
La interacción fue buena, hubo mucha conexión con compañeros y estudiantes.  Realizamos trabajos conjuntamente y compartimos nuestras miradas y nuestros trabajos. La exclusión se presentó en cuanto al reconocimiento y uso de herramientas, no de las temáticas ni de los compañeros.

  • ¿Cuáles son los factores que lo llevaron a persistir (o a desistir) de su participación en estos espacios? ¿La tecnología tuvo algo que ver allí?
Como ya lo he enunciado no quiero quedarme por fuera ni atrás de la tecnología, del mundo, ni de los estudiantes. También he descubierto muchos elementos que me han enriquecido académica y personalmente. Además me gusta estar actualizado y "estar en la jugada" de la tecnología. Definitivamente es la tecnología la que me ha motivado a incorporarme a ella y a vincularla a mi vida y a mi profesión.   

  • ¿Por qué dejó de participar en estos espacios? Note que una respuesta posible es "porque se acabó el curso".  ¿La tecnología elegida tuvo alguna incidencia en esto?  ¿Quedaron cosas "abiertas" cuando terminó su participación?  
No he dejado de particpar, aún sigo trabajando los cursos. Inclusive vinculo muchos elementos de los curso virtuales a los que son presenciales y termino trabajando en las dos formas, me gusta el contraste y la complementación.